Una experiencia en Suecia de Álvaro Moreno
Facultad/Escuela/Centro/Servicio | Facultad de Ciencias de la Comunicación |
Apellidos | Moreno Alonso |
Nombre | Álvaro |
País de Acogida | Suecia |
Universidad de Acogida | Göteborgs Universitet (University of Gothenburg) |
Fecha de inicio de la movilidad | 26 de Agosto de 2022 |
Fecha de fin de la movilidad | 14 de Enero de 2023 |
Tipo de Movilidad | Estudiante de Grado |
El 26 de agosto de 2022, coger un par de maletas cargadas de nervios, ilusión y muchos sentimientos encontrados se tradujo en un vuelo directo de 2.642 km con destino Göteborg, Suecia. Esta ciudad me dio la bienvenida con una nueva lengua, una acogedora ciudad dentro de un país muy diverso, con gente muy especial y muchas aventuras que no esperaba vivir. El primer día comenzó con la cuenta atrás de una etapa tatuada con nuevos retos que afrontar. Sentir que el mundo estaba bajo mis pies se convirtió en más que una realidad; conocer lugares recónditos e inolvidables, en algo habitual. Romantizar mi vida con un simple anochecer en ferri desde Saltholmen a Stenpiren fue de las cosas más bonitas que podía haber imaginado. ¿Y qué decir de ver la nieve mientras dormía? Que solo tenía que enfundarme un gorro y unos guantes para bajar a la calle y disfrutar de ella. ¿Y la gente? Las personas con las que compartía nuevas experienc ias se convirtieron en imprescindibles. En Göteborgs Universitet (@universityofgothenburg) aprendí mucho. Esta universidad me ofreció una serie de cursos que no esperaba estudiar, como estudios globales de género, de modo que fue muy gratificante aprender de distintas materias y áreas de la Comunicación. Además, el modo de impartir las clases fue muy práctico y dinámico, algo que me permitió conversar y debatir ideas junto al resto de estudiantes internacionales. Hubo muchas visitas improvisadas, cenas en casas desconocidas, en otras residencias universitarias y en Fridhemsgatan, una pieza esencial de mi puzle sueco.Ese lugar que, a medida que pasaba el tiempo, se convertía en hogar y cuyas paredes fueron testigos de todos los vaivenes sentimentales que giran en torno a la vida, a nuestra vida. Poco a poco, comencé a confiar en aquel lugar y construí un hogar. El choque cultural es un hecho, pero la experiencia Erasmus es uno de los mejores ejemplos para poder experimentarlo de primera mano y conocer a gente fascinante. Si soy honesto, qué alegría la mía de haber vivido esta etapa y qué alegría la mía de haber conocido a semejante ciudad y compañía. Volvería a Suecia como destino Erasmus sin dudarlo y estudiando en la misma universidad. Si hay alguien que esté leyendo este texto y está interesado/a en esta oportunidad, recomiendo mi universidad de destino para poder disfrutar unos meses de la vida escandinava, con sus paisajes de postal, los deliciosos Kanelbullar (rollos de canela) tomados en sus peculiares ‘fika’, su maravilloso parque de atracciones de Liseberg y un sinfín de aventuras inolvidables. ¡Embarcaos en esta bonita experiencia! ¡Mucha suerte! |
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