Diez estudiantes participan en la Academia Europea de Innovación, líder en formación de emprendedores tecnológicos
A esta cita, celebrada en Oporto, acudieron 500 alumnos de 80 países diferentes
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Diez estudiantes de la Universidad de Málaga han participado este verano en la ‘European Innovation Academy’ (EIA), con el objetivo de recibir la prestigiosa formación para emprendedores tecnológicos que imparte este organismo.
El proyecto surge del Vicerrectorado de Innovación Social y Emprendimiento de la UMA, que, fruto de su apuesta por la experiencia internacional de los universitarios, continúa promoviendo su participación en programas de innovación empresarial y social, con el fin de impulsar la creación de empresas de base tecnológica y startups.
Los diez alumnos becados tenían perfiles sobresalientes en las dos últimas ediciones del Flash Session Hackathon, el mayor concurso de ideas emprendedoras de la Universidad de Málaga. Su participación en la EIA tuvo lugar entre el 14 de julio y el 2 de agosto, en la Facultad de Economía de la Universidad de Oporto (Portugal).
Todos ellos formaron parte de un programa de estudios de tres semanas de duración sobre emprendimiento e innovación, en el que 500 estudiantes de más de 80 países diferentes se reunieron para trabajar y desarrollar una mentalidad emprendedora y habilidades empresariales. Una completa formación de futuros emprendedores a cargo de profesionales de las mejores instituciones del mundo, como la Universidad de Stanford, U.C. Berkeley y Google.
De perfiles tan variados como Marketing e Investigación de Mercados, Ingeniería del Software, Turismo, Publicidad y Relaciones Públicas, Ingeniería Industrial, ADE y Economía, Master en Ingeniería Industrial o Master en Desarrollo Social de la Cultura Artística, los estudiantes de la UMA participantes han coincidido en destacar que esta experiencia internacional ha sido enormemente enriquecedora.
En palabras de uno de ellos, Pedro Antonio Benito, ingeniero de software, participar en la European Innovation Academy ha sido también una experiencia transformadora. “El poder de la diversidad nunca ha sido tan evidente para mí. Interactuar con mentes brillantes de todo el mundo no solo amplió mi perspectiva, sino que también reafirmó la universalidad de la pasión emprendedora”.
Caldo de cultivo
Y es que la experiencia internacional es imprescindible para cualquier estudiante que quiera tener éxito en la vida profesional y adquirir contactos internacionales en todo el mundo. “El ambiente de emprendimiento y la diversidad de ideas y culturas presentes entre los participantes crearon un caldo de cultivo único para la generación de ideas innovadoras. La posibilidad de trabajar en equipos multidisciplinarios fue particularmente gratificante, ya que pude aprender a combinar diferentes perspectivas para abordar desafíos complejos”, ha indicado a su vez Íñigo Rodríguez, estudiante de Marketing del programa SICUE.
En la escuela de verano EIA se trabaja en equipos de cinco estudiantes internacionales para abordar conjuntamente los problemas. Para ayudarles, mentores experimentados apoyan y guían a los participantes, que tienen acceso al software Epiprodux, la herramienta más moderna de gestión de productos con datos de mercado en tiempo real, y una biblioteca de experimentos. Dos de los alumnos de la UMA participantes en esta experiencia estuvieron entre los diez mejores equipos de un total de cien.