La primera jornada del 23 Campeonato del Mundo Universitario ha comenzado ha rodar esta tarde con tres partidos muy emocionantes y que se resolvieron en los últimos cinco minutos de juego. El encuentro que cerraba el telón en el Grupo A, España arrancó con un contundente triunfo por 31-18 frente a China Taipei. El dominio de los hispanos fue absoluto y no dejaron a su rival coger ritmo este resultado los aúpa a la primera posición del grupo.  Previamente, Japón había superado a Rusia por 25-29, en un resultado que puede resultar engañoso ya que a falta de cinco minutos los nipones sólo estaban un gol por arriba y los rusos dispusieron de un penalti para igualar el marcador. En el grupo B, otros dos partidos más disputados si cabe los que enfrentaron a los combinados nacionales de Corea y Rumanía, que se decantó del lado rumano 29-28, y a Egypto y Portugal, con victoria egipcia por dos goles de diferencia 26-24. Ese gol de diferencia de más permite a la única selección del continente africano presente en la cita mundialista liderar su grupo al término de la jornada inaugural del mundial.

España inició el choque con mucho acierto en ataque, que a su vez, también se tradujo en varias paradas de su guardameta Sánchez. Los asiáticos lo intentaron desde todos los ángulos, desperdiciaron hasta un par de lanzamientos desde 7 metros, sin encontrar el fondo de las mallas. Anta la falta de gol, China Taipei buscó nuevos sistemas defensivos con los que robar con mayor facilidad balones, pero los ofensivas españolas terminaron en gol. Bien por medio de tiros desde 9 metros, con circulaciones rápidas de balón o con asistencias a jugadores de segunda línea. Cuenca, extremo derecho, y Figueras, pivote, ajustaron con precisión el punto de mira hacia el marco oriental. Al descanso se alcanzó una ventaja de once tantos (18-7).

La segunda mitad comenzó con un parcial 3-0 favorable a China Taipei. La relajación y ausencia de intensidad en los jugadores hispanos propició que se abrieran huecos para que su rival los aprovechara. Maireles, que suplió a Sánchez en la portería, entonó con sus paradas a sus compañeros, que volvieron a subir una marcha en su juego para dejar listo el primer compromiso del torneo. España movió su banquillo, cada jugador aportó su granito de arena y el triunfo final se certificó con un marcador de 31 a 18 a favor de la selección nacional. La selección española, en la segunda jornada, se medirán a Rumanía a las 18,45 horas en el Centro de Tecnificación de Atletismo (CTA).

GRUPO B

En el Grupo B, Rumanía y Corea protagonizaron un intenso duelo en el que se enfrentaron la rapidez y el juego eléctrico de los asiáticos frente a la altura y fortaleza de los europeos. El resultado final, 29-28 a favor de Rumania, habla bien a las claras de la igualdad registrada a lo largo de todo el partido.

En el primer tiempo, el marcador fue muy igualado durante los 10 primeros minutos (1-1 en el minuto 5 y 4-4 en el 10), para ir decantándose poco a poco del lado rumano que en los minutos 15 y 20 estaba un gol arriba (7-6 y 9-8); diferencia que se incremento a dos tantos en el 25 (12-10) y en el descanso (14-12). Durante este período destacó Demis Cosmin Grigoras, el dorsal 23 de Rumanía, autor de ocho de los catorce goles de su equipo. Por el lado coreano, el máximo anotador de la primera mitad fue Jaeseo Lim, responsable de los lanzamientos de penalti y autor de 5 tantos.

En la segunda mitad, los primeros cinco minutos fueron de intercambio de goles, tres por equipo, pero en los cinco siguientes, Corea apretó a fondo y, con un parcial de 5-3, logró igualar el marcador. Los diez siguientes minutos fueron de máximo lucimiento de ambos porteros, que lograron detener varias penas máximas y un buen número de jugadas con remates claros desde la línea de seis metros. Darius Mkarius, por Rumania, y el coreano Hyunngjin Kim, mantuvieron vivos a sus respectivos equipos en la fase más loca del encuentro. Se entró en los últimos cinco minutos del choque con un empate  a 25 en el marcador. Una doble expulsión en el equipo coreano, a falta de 2 minutos para el final y empate a 27 en el luminoso, fue determinante para que Rumanía se terminara adjudicando la victoria por un ajustado 29-28.

Entre los jugadores más determinantes, al término de los 60 minutos de juego, además de los porteros cabe destacar, por el lado rumano el dorsal 23, Grigoras, continuó con su racha goleadora hasta sumar un total de 17 dianas y por el lado coreano a Seunggwon Oh, autor de 10 goles, ocho de ellos anotados en la segunda mitad.

En el otro partido del grupo B, jugado en el pabellón del CTA, Egipto superó a Portugal (24-26) , resultado que le sirve para encabezar el grupo al término de la primera jornada del campeonato en categoría masculina. El espectáculo no faltó en un choque muy disputado desde el primer lance. Los ataques superaron a las defensas, por lo que el luminoso no tuvo un dueño claro hasta mediado el primer tiempo. Los africanos impusieron un ritmo muy alto de juego aprovechando su potencia física y el poderoso lanzamiento exterior de sus primeras líneas. Y, sobre todo, repitieron en muchas ocasiones saques rápidos de centro para evitar que los lusos armaran su defensa.

Portugal padeció la intensidad en los contactos de los egipcios y se atascaron en ataque. Esta situación de encuentro, la aprovecharon para abrir brecha en el marcador a diez minutos del descanso (9-11). Con ventaja de tres goles (13-16) para Egipto se marcharon a los vestuarios. Tras la reanudación, Portugal aumentó su eficacia ofensiva gracias a los 8 tantos del extremo izquierdo Branquinho. En la portería, Carvalho blocó varios tiros del combinado africano para ajustar el marcador, los únicos que se le resistieron fueron los del pivote Shady, autor de 8 goles. A la recta final del encuentro se llegó con mucha igualdad y los fallos condenaron a los portugueses, que cayeron 24 a 25.

 

GRUPO A

En el grupo A, Japón arrancó la competición con un meritorio triunfo 25-29 frente a Rusia. El duelo entre ambas selecciones fue trepidante y se decidió por pequeños detalles. Loa asiáticos comandaron el marcador durante los primeros minutos gracias a un juego muy veloz. La defensa rusa no pudo parar los movimientos eléctricos de los nipones, que llegaron a colocarse con cuatro goles de ventaja a falta de cinco minutos para el descanso. Tokuda firmó un primer tiempo impecable con 7 tantos y Kato, con varias paradas de muchos reflejos, echó el cerrojo al marco nipón.

El paso por los vestuarios enfrió el juego dinámico de Japón y Rusia saltó con mucha más garra e intensidad en ambos lados de la pista. Con un parcial de 5-1, en los primeros compases del segundo período, consiguió voltear la diferencia en el marcador. El combinado asiático pecó de precipitación y perdió todos los duelos contra los defensores rusos. La conexión con el pivote Gariaev, autor de 3 tantos, fue la principal arma ofensiva de la selección del norte de Europa. El partido tuvo dos partes muy diferenciadas, pero en el minuto 48 se produjo una acción decisiva. Kato detuvo un 7 metros a Kiselev y Japón se volvió a meter en el choque. Agarie cogió los galones en ataque, en la primer mitad fue Tokuda, para apretar el marcador. A falta de cinco minutos, Rusia, que caía por un gol, se estrelló con los palos y encajó un parcial de 3-0. Al término del encuentro, el luminoso registró un 25-29 favorable a una selección japonesa que no bajó los brazos en ningún instante.

Antequera, 27 de junio de 2016