El rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez, y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, han firmado esta mañana un convenio marco de colaboración entre ambas instituciones, que permitirá poner en marcha un conjunto de programas y actividades, a través de convenios específicos, que buscarán redundar en el beneficio mutuo y en el de la sociedad.

Una comisión mixta universidad-ayuntamiento será a partir de ahora la encargada de poner en marcha un conjunto de programas específicos, que abarcarán los ámbitos de la formación, la investigación, el asesoramiento científico, el desarrollo tecnológico, la innovación, el emprendimiento o la cultura, entre otros.

José Ángel Narváez y Francisco de la Torre han coincidido en calificar el acuerdo como “histórico para la universidad y para la ciudad”, además de en el deseo de que la comisión mixta “empiece a trabajar de inmediato” para lograr los objetivos que se persiguen.

En este sentido, el rector ha puesto como ejemplo la puesta en marcha de un programa que permitirá unir trabajos de fin de grado en escuelas y facultades con las necesidades de la ciudad: “Queremos poner al servicio de la sociedad todos nuestros recursos, desde nuestra capacidad de investigar, de innovar o de asesorar, hasta el talento de nuestros estudiantes”.

Francisco de la Torre ha destacado “la potencia de la suma de la capacidad de formación, investigación y desarrollo tecnológico de la UMA, que se pone al servicio del ayuntamiento; y la capacidad recíproca de técnicos y empresas municipales, a disposición de la Universidad”. El Alcalde ha abogado en su intervención por “aprovechar esta potencia en toda su dimensión, ser ambiciosos y llegar tan lejos como podamos”.

El convenio entre la UMA y el Ayuntamiento de Málaga establece siete modalidades de colaboración: La ejecución de proyectos y programas conjuntos de investigación, a realizar en los departamentos, institutos universitarios y centros de investigación de la Universidad de Málaga; la prestación de servicios técnicos y de asesoramiento científico; la cooperación en programas de formación; la organización de actividades comunes relacionadas con la promoción social de la investigación, el desarrollo tecnológico, la innovación y las nuevas tecnologías; la organización conjunta de cursos, seminarios, conferencias y jornadas científico técnicas y de formación; el intercambio de información y documentación; y la utilización común de equipamiento de ambas instituciones para el desarrollo de actividades conjuntas.